Saul Klein de Index Ventures, nos cuenta en este vídeo grabado en una de las conferencias organizadas por Plugg las razones por las cuales a día de hoy Europa puede competir de tú a tú con USA en internet y pone unos cuantos ejemplos de » internet success stories».
Razones y Reflexiones (¡No hay Excusas!)
No hay escasez de talento técnico en Europa
El coste de iniciar una compañía de software en internet es muy bajo, debido fundamentalmente a la institucionalización del opensource/ la existencia de grandes plataformas abiertas sobre las cuales podemos construir servicios a precios bajos (Zynga, Playfish)
La fortaleza de las redes y eventos de emprendedores que se han creado en Europa (faltaría una mayor unión entre los diferentes países)
En Europa se sabe como trabajar con Silicon Valley, con el cual es preciso colaborar de forma muy cercana
Hay suficiente capital riesgo en Europa para invertir en este sector y crear campeones mundiales
Mi opinión es que si bien es cierto gran parte de lo que nos comenta Saul, pienso que el ecosistema de Silicon Valley es parte fundamental de su éxito, lo cual es muy difícilmente replicable (incluso dentro de USA donde algunos también lo están intentando). Creo también que el tema de la ausencia de suficiente inversión de capital riesgo/ business angels en internet en Europa es otra de las causas fundamentales de que estemos todavía a años luz de los americanos… porque si no hubiera excusas, estaríamos seguro en otra posición y la realidad es que no existen todavía grandes empresas europeas de internet. Lo que sí es cierto, es que las barreras de entrada en internet no son elevadas y tenemos un gran potencial para poder hacer mucho más de lo que estamos haciendo.
Por cierto que en las historias europeas de éxito en internet se echan de menos algunas relevantes…
Érase una vez, en un lejano, libre y rico reino llamado Weblandia, vivían dos buenos amigos llamados Uguel y Fónico. Su relación se había forjado con el paso de los años, ya que tenían intereses complementarios y la amistad que había surgido se desarrollaba en un ambiente de cordialidad y buena convivencia, y se apoyaba, porqué no decirlo, en el floreciente crecimiento que ambos estaban consiguiendo en sus negocios.
Fónico, que era el mayor de los dos, había construído con el paso de los años, mucho esfuerzo y grandes cantidades de dinero, una extensa red de caminos que cubrían todo el reino: desde los poblados más habitados hasta sus más recónditos, despoblados e inaccesibles territorios.
Esta fabulosa red, permitió a sus habitantes poder moverse con libertad entre todas sus poblaciones y había favorecido el florecimiento de muchos negocios a su alrededor tanto en su construcción como en su señalización, seguridad, fabricación de novedosos vehículos para circular (pexes, movlexs, laktops, …), etc etc.
Con el paso de los años, el número de habitantes del reino que podían permitirse el pago del peaje por circular por estos maravillos caminos fue creciendo y se quedaban fascinados por poder descubrir los fantásticos nuevos lugares a los que tenían libre acceso y la igualdad con la que se trataba a todos los viajeros.
A la par que la red se extendía, fueron creciendo poco a poco una serie de Nuevos Mercaderes que utilizaban la red para muy diversos negocios: desde los que publicaban pergaminos con toda la información necesaria para encontrar lugares desconocidos en el reino (los Uguel), hasta los que creaban grupos de amigos con intereses comunes (los Fazbunk), o los vendedores ambulantes que ponían sus puestos en los caminos (los Amakonk, los izeis), los guardianes de viajeros importantes y muchos otros negocios que comenzaban a florecer poco a poco.
Todo ello transcurría en un entorno de armonía que además se había convertido en un círculo virtuoso, en el que uno(s) daban el acceso, otros hacían uso del acceso para hacer nuevos negocios y finalmente los viajeros del reino que circulaban por la red ya fuera por placer, para comprar o vender, aumentar su cultura, relacionarse con sus amigos, etc, etc. En definitiva, todos salían muy beneficiados de la forma en que se desarrollaban los acontecimientos, el papel que cada uno desempeñaba y las reglas que lo regulaban.
Pero no todo podía ser perfecto, y el problema llegó cuando los caminos que Fónico había construído, comenzaron a quedarse pequeños, y no permitían el volúmen tan elevado de circulación que transitaba por su red. A su vez, los negocios de los Nuevos Mercaderes estaban creciendo a ritmos muy superiores que los peajes, lo cual producía cierta inquietud en algunos.
Para todos parecía evidente que había que aumentar el tamaño de la red y realizar nuevas inversiones, pero los habitantes de Weblandia no se podían permitir el pago de unos mayores peajes con los que financiar ese desarrollo.
Para solucionar este problema, Fónico pensó que sería una buena idea comenzar a cobrar un peaje adicional a aquellos que más beneficio obtenían del uso de sus caminos, ya que hasta ese momento lo hacían (casi) de manera gratuíta, y comenzó a negociar con Uguel, que era el mayor de esos Nuevos Mercaderes.
Los habitantes de Weblandia se alarmaron mucho ante esta situación, ya que estaban en riesgo las reglas básicas de juego imperantes hasta ese momento, la neutralidad y la libertad, que les habían permitido tanto a ellos como a los Nuevos Mercaderes, una feliz circulación por su reino y un libre desarrollo de nuevos y florecientes negocios.
Temían también por la nueva situación que se podía crear, en la que estaba en peligro la base sobre la que se había desarrollado el reino y que no era otro que la igualdad entre todos sus habitantes y asistían con expectación a la intervención de los emisarios del Rey que apoyaban este posible cambio.
Sin embargo, los sabios habitantes de Weblandia conocían tanto la necesidad de las nuevas inversiones como los altos beneficios que los Nuevos Mercaderes tenían, y lo que anhelaban en el fondo de sus corazones era que las negociaciones entre Fónico, Uguel (y probablemente sus amigos Fazbunk, Amakonk, etc) y los emisarios del Rey, no alteraran la neutralidad de la red, ya que al final todos saldrían perjudicados.
En esas estaban cuando las calles y plazas de Weblandia amanecieron inundadas de unos pequeños pasquines firmados por www.venturatis.com en los que se podía leer: ¿debe Fónico cobrar a los mercaderes más ricos? (los habitantes más preocupados también escribieron sus comentarios, que fueron muy apreciados)
Los adictos a Techcrunch (entre los que me encuentro) seguro que conocéis sobradamente el conflicto que uno de sus bloggers tuvo con Offerpal. Para aquellos que no lo conozcan, o se lo perdieran en su día, ahí va la historia.
El pasado 30 de Octubre, se celebró una conferencia en San Francisco (Virtual Goods Summit) a la que asistían importantes empresas relacionadas con redes sociales, desarrollo de juegos y diversos actores de la industria.
En el turno de ruegos y preguntas, el conocido blogger (y cofundador) de Techcruch, Michael Arrington, preguntó a la CEO de Offerpal sobre la ética de su modelo de negocio, aludiendo a presuntos timos a los que podía conducir alguno de sus productos. Michael se refería a que en determinados juegos muy populares en Facebook o MySpace (como Farmville), existían determinados anunciantes que realizaban prácticas más que dudosas.
Para los que no conozcáis el tema, la «cadena de valor» es la siguiente:
Las redes sociales captan usuarios
Dentro de estas redes sociales existen determinados juegos
Como estos juegos son muy populares, las redes sociales cobran a los desarrolladores de juegos y éstos a sus anunciantes por tener presencia en sus juegos
Estos anunciantes, ofrecen «bienes virtuales» a los jugadores. Por ejemplo, si te suscribes a una tarjeta de crédito, la compañía x te da a cambio más vidas en un juego, o más armas, etc
El problema está con algunos anunciantes, que realizan actividades más que dudosas y poco transparentes para el usuario. Por ejemplo los que te piden que hagas un test de inteligencia y cuando terminas te piden que introduzcas tu móvil para mandarte los resultados, tras lo cual quedas suscrito automáticamente a un servicio que te cuesta 10$ al mes y algunos usuarios no se percatan del tema (bien porque no está bien publicitado o porque se trata de un menor).
Pues bien, en el turno de réplica, la CEO (y co fundadora) de Offerpal calificó el plantamiento de M. Arrington como «(…) shit, doubleshit, and bullshit” (…)». Al día siguiente, el blogger publicó un duro post sobre estas prácticas junto con el vídeo de su discusión del día anterior y comenzó a realizar una actualización de su post en el que se hacía eco del tsunami que se desató tras este incidente: reacciones de redes sociales retirando a determinados anunciantes, las discusiones que se generaron entorno al asunto, reacciones de fondos de capital riesgo y por último un post el 4 de Noviembre en el que se anunciaba el cambio de CEO en Offerpal, sólo 5 días después del «(…) shit, doubleshit, and bullshit”.
Impresionante:
El poder de la prensa virtual
La necesidad de establecer una ética en la red y el control (¿autocontrol?) de la misma
La capacidad de monetización de las redes sociales
La fuerte dependencia de las redes sociales en determinados anunciantes y el círculo virtuoso (¿vicioso?) que se crea entre ambos
El daño que puede hacer a la industria las prácticas de determinados actores, en un momento en que se comienzan a monetizar determinados modelos de negocio
Dos socios de Volition Capital, Larry Cheng y Dave Gordon, han elaborado un original ranking con los mayores inversores en internet. El criterio que han seguido es el promedio de visitantes únicos en el cuarto trimestre de 2009 de las empresas en las que han invertido de acuerdo a la información facilitada por Compete.
Hace unos meses, hicieron también un ránking de los mejores blogs de VC con el mismo criterio que es muy interesante y útil para todo aquel que quiera saber cómo piensan los VCs USA de internet y en qué están invirtiendo en estos momentos, una información de lo más valioso. Espero que os sea útil.